domingo, 8 de noviembre de 2009

Problemas ambientales en el mundo y en Venezuela

Venezuela sigue atravesando una grave situación ambiental producto de un modelo desarrollista que le ha impuesto la clase dirigente de ayer y de hoy, afectando particularmente regiones de alta fragilidad y valor ecológico, como las selvas de Guayana y el Amazonas. Bajo un esquema de desarrollo sin conciencia ecológica que se remonta a los años 50, tanto los políticos que han dirigido el Estado venezolano como los sectores privados nacionales e internacionales que piensan sólo en el negocio a corto plazo, vienen arrasando con nuestros ecosistemas tropicales generando pobreza y destrucción para las futuras generaciones y la extinción de seres vivos que han convivido en equilibrio sin intervención del hombre, poniendo en riesgo incluso especies que pueden ser fuente de biomedicina para muchas enfermedades que actualmente sufre la Humanidad.

Así se vienen presentando distintos casos que son resultado de actividades económicas, o de megaproyectos estatales, a espaldas de las comunidades locales, con repercusiones ambientales y sociales incuantificables, que requieren una respuesta oportuna de la comunidad nacional e internacional y los ecologistas venezolanos lo asumimos, tales como:

> Forestal Imataca, área rica en bosques lluviosos de gran biodiversidad pero de alta susceptibilidad a la actividad aurífera, la cual implica grandes deforestaciones y contaminación con mercurio y cianuro. Desde ese año venimos luchando contra esa política minera y todavía exigimos la derogatoria del cuestionado Decreto (aún no resuelto a pesar del discurso presidencial) para que sea sustituido por una normativa, previa consulta pública adecuada, que no perjudique al área protegida.
>La explotación de carbón en la Sierra de Perijá, a cielo abierto, que viene destruyendo las cuencas hidrográficas más importantes del Estado Zulia a pesar de la oposición de las comunidades locales y en especial de los indígenas Barí y Yuckpa. A esto se le suma la proyección de un puerto carbonífero denominado "América", en la entrada al Lago de Maracaibo, que de construirse afectaría la pesca artesanal y el turismo y sólo dejaría más contaminación a las aguas aledañas.
> La minería en las áreas protegidas del Estado Bolívar que protegen a la cuenca del río Caroní, actividad que viene destruyendo los bosques guayaneses con deforestaciones, sedimentación y contaminación de los ecosistemas y del hombre. Todo esto sin importar que dicha cuenca aporta el agua que abastece el consumo de los principales centros poblados de la región y a la represa del Gurí, que produce por lo menos el 70 % de le energía eléctrica del país.
> La construcción del tendido eléctrico a Brasil atravesando varias áreas protegidas de Guayana, entre la que destacan el Parque Nacional Canaima, la Reserva de Imataca y la Zona Protectora Sur de Bolívar, que junto a otras infraestructuras y un marco legal minero favorable a las transnacionales, sólo sirve para fomentar los intereses del oro y diamantes, impactando el ambiente e irrespetando a las comunidades indígenas Pemón que viven en la Gran Sabana.
> La contaminación petrolera producto principalmente de los continuos derrames que ocurren los cuales vienen acabando con el Lago de Maracaibo y afectan ríos y campos agrícolas del occidente y oriente del país. Hasta la fecha el Estado no ha emprendido una política de promover fuentes energéticas alternativas a pesar del daño ambiental que ocasiona el petróleo, responsable en parte de los cambios climáticos que ocurren en el mundo.
> La extracción de hidrocarburos en el Delta del Orinoco, donde habitan los indígenas Waraos. Esta región conforma uno de los ecosistemas más frágiles del país, ya que cualquier contaminación química lo afecta en su conjunto. El Delta requiere ser protegido integralmente y suprimirse la actividad petrolera la cual ya viene haciendo estragos en sus caños.
> El saque y tráfico de madera en todo el territorio nacional, y en especial en los bosques cercanos a las ciudades, como los de la Serranía del Interior, la Península de Paria y el Macizo de Nirgua. Situación que es producto de la falta de vigilancia y a la corrupción de funcionarios públicos.
> La modificación y perturbación de ecosistemas costeros del país, tales como la Ciénaga de Los Olivitos en el Zulia, Morrocoy en Falcón o Playa Valdés en Nueva Esparta, no importando la figura de protección legal del área ni mucho menos las poblaciones aledañas, sólo para beneficiar intereses económicos ajenos a la nación y afectando a muchas comunidades de pescadores venezolanos.
> La contaminación del aire y de las aguas en las ciudades sin que se produzcan medidas de control eficientes por parte de las autoridades, debido también a la falta de conciencia social sobre las implicaciones a la salud y al ambiente.

¿Que es la Legislación ambiental ? buena pregunta verdad


La normativa legal venezolana contempla desde la constitución de 1961, un marco para la conservación del ambiente. Sin embargo, desde 1908, ya existían algunas disposiciones jurídicas que trataban la materia ambiental como lo fueron la Ley de Bosques y de Montes.
La constitución de 1999, también plantea la protección del ambiente como una prioridad nacional. Establece el deber de proteger y mantener el ambiente en beneficio de sí misma y del mundo futuro y el derecho de disfrutar de una vida y un ambiente sano, seguro y ecológicamente equilibrado, por lo tanto el Estado tiene la labor de proteger el ambiente, la diversidad biológica, genética, los procesos ecológicos y las áreas protegidas.
En el año 1976 se promulgan la Ley Orgánica del Ambiente y en 1986 la Ley Orgánica de la Administración Central, mediante ésta última se crean el Ministerio del Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables, único organismo de esta naturaleza dentro de los países del Convenio Andrés Bello. La primera tiene como objetivo establecer dentro de la política del desarrollo integral de la nación, los principios rectores para la conservación, defensa y mejoramiento del ambiente en beneficio de la calidad de vida.
Otra figura relevante es la de la Ley Orgánica para la Ordenación del Territorio, ésta determina, entre otras cosas, las pautas de las Áreas Bajo Régimen de Administración Especial (ABRAE). Otros textos legales relacionados con la conservación del ambiente son: la Ley de Reforma Agraria, Ley Forestal de Suelos y Aguas, Ley de Protección a la Fauna Silvestre, Ley de Pesca, Ley de Minas.
En el ámbito internacional, los países de la región amazónica han establecido un convenio para uniformar criterios, vinculados a la conservación y uso sustentable de la biodiversidad biológica, lo que desembocó en la creación de la Ley de Diversidad Biológica que establece la obligación de elaborar y actualizar la estrategia nacional con la finalidad de incorporar la gestión de la diversidad biológica en los planes de la nación, de tal forma que se tomen en cuenta el diseño de una política internacional ambiental de cooperación técnica y económica y la preservación de la áreas naturales protegidas.
Venezuela está suscrita a diversos acuerdos bilaterales de cooperación a favor de la conservación ambiental. Entre ellos: el Tratado de Cooperación para el Desarrollo de la Cuenca Amazónica, Convenio para la Protección y el Desarrollo del Medio marino de la Región del Gran Caribe, Protocolo de Cooperación para Combatir los Derrames de Hidrocarburos en la Región del Gran Caribe, Tratado de Protección de la Naturaleza y sus Elementos, Tratado por el que se Prohíben los Ensayos con Armas Nucleares en la Atmósfera, en el Espacio Ultraterrestre y Debajo del Agua y Convención sobre la Prohibición del Desarrollo, Producción y Almacenamiento de Armas Bactereológicas y Toxínicas.
Actualmente se discute la aprobación de la Ley de Tierras en la Asamblea Nacional, normativa de alto interés para el ámbito ambiental, pues podría definir usos y limitaciones de terrenos públicos y privados.

Especies en peligro

La pérdida de la diversidad biológica es una de las crisis más apremiantes del mundo y la preocupación sobre el estado de los recursos biológicos de los cuales depende significativamente la vida humana está aumentando. Se calcula que cerca de 300 especies han sido eliminadas del planeta en los últimos 30 años y casi 1000 más podrían estar en grave peligro de desaparecer.

Nuestro país no escapa a esa realidad ya que muchas especies están disminuyendo a niveles poblacionales críticos, hábitats importantes han sido destruidos, fragmentados y degradados, y los ecosistemas han sido desestabilizados a través del cambio climático, la contaminación, las especies invasoras y el impacto humano directo.

Uno de los esfuerzos más importantes que se llevan a cabo para tratar transmitir la urgencia y la magnitud de peligro en la que se encuentran las especies es la Lista Roja de la UICN la cual es el inventario más completo del estado de conservación de las especies de animales y plantas a nivel mundial. Esta lista utiliza un conjunto de criterios para evaluar el riesgo de extinción de miles de especies y subespecies. Estos criterios son relevantes para todas las especies y todas las regiones del mundo. Con su fuerte base científica, la Lista Roja de la UICN es reconocida como la guía de mayor autoridad sobre el estado de la diversidad biológica.

La Lista Roja de la UICN se guía por una serie de categorías que agrupa a las especies según el grado de posibilidad de extinción en el que se encuentran, estas categorías son:

Extinto: Cuando no existe duda razonable de que el último individuo de una especie ha muerto

Extinto en estado silvestre: cuando se conoce que sólo sobrevive bajo cautiverio, cultivada o como una población (o poblaciones) naturalizada muy lejos de su hábitat natural. Una especie se presume en extinción en estado silvestre cuando se han realizado investigaciones profundas en su hábitat, en momentos adecuados y no se ha conseguido registrar un solo individuo.

En peligro crítico: cuando enfrenta un riesgo muy alto de extinción en estado silvestre en el futuro inmediato.

En peligro: cuando no está críticamente en peligro pero enfrenta un riesgo alto de extinción en estado silvestre.

Vulnerable: cuando no está críticamente en peligro o en peligro pero enfrenta un alto riesgo de extinción en estado silvestre en el mediano plazo

Menor riesgo: riesgo cuando se ha evaluado, pero no satisface los criterios de ninguna de las categorías de críticamente en peligro, en peligro o vulnerable. Las especies que se incluyen en esta categoría pueden ser separadas en tres sub-categorías:
> Conservación-dependiente: Las especies que son centro de atención de programas de conservación continuos para especies específicas o hábitats específicos por una especie en particular, cuyo cese en un periodo de cinco años podría resultar en recategorizar dicha especie en una de las categorías amenazadas ya descritas.
> Casi amenazada: Especies que no califican para ser conservación-dependientes, pero que están cerca de ser calificadas como vulnerables.
> Menor importancia: Especies que no califican para ser conservación-dependientes o casi amenazadas.

Datos insuficientes: cuando existe información inadecuada para realizar una evaluación de su riesgo de extinción basado en su distribución y o estado poblacional. Una especie en esta categoría puede ser bien estudiada y su biología bien conocida, pero los datos apropiados sobre abundancia y/o distribución están ausentes. Esta categoría no es por lo tanto, una categoría de amenaza o de bajo riesgo.

No evaluado: Cuando no ha sido evaluado con base en los criterios antes expuestos. Correspondería a las especies que por falta de información y/o tiempo, o por no considerarlo necesario, fueron excluidos de los estudios en que se basa el presente libro

Las Aéreas Protegidas


/El régimen especial de un área está constituido por un conjunto de normas y reglas que tiene por objeto la defensa, conservación y mejoramiento de determinados espacios, cuyas características y condiciones ecológicas difieran de la estructura y composición geográfica, paisajista, topográfica y socio-cultural del resto del territorio nacional, lo cual hace indispensable la formulación de criterios especiales, en torno a la forma de aprovechar y de preservar estos espacios.

///Hoy en día el país cuenta con un extenso y complejo conjunto de áreas protegidas, las cuales abarcan aproximadamente el 46 % del territorio nacional, y están representadas en 249 áreas especialmente creadas para proteger los recursos naturales y el ambiente. Estas áreas se llaman ÁREAS BAJO RÉGIMEN DE ADMINISTRACIÓN ESPECIAL (ABRAE) y están consagradas en la Ley Orgánica para la Ordenación de Territorio (LOPOT) de 1983.

Parques Nacionales: están constituidos por aquellas regiones que por su belleza escénica y natural, o por la flora de importancia nacional que el ellas se encuentran, ameritan estar sometidos a figura legal de protección con los objetivos de: preservar intactas muestras de los ecosistemas y paisajes más relevantes del país, proteger recursos genéticos y procesos ecológicos inalterados, preservar valores escénicos, geográficos o geomorfológicos únicos o excepcionales, proveer oportunidades a la educación, investigación científica y recreación, conservar lugares y objetos del patrimonio cultural, conservar la producción de agua.

Monumentos Naturales: Son áreas que contienen al menos un rasgo natural específico sobresaliente de interés nacional, puede consistir un accidente geográfico, un sitio de belleza o rareza excepcional, formaciones geológicas o hechos ecológicos que merecen percibir protección absoluta. Los objetivos que persigue esta figura son la preservación de los valores geográficos, geológicos, escénicos o ecológicos excepcionales o únicos, proveer oportunidades a la investigación científica y a la educación especializada, recreación pasiva y a la apreciación del patrimonio natural del país, coadyuvar el atractivo turístico de la región, conservar la producción de agua.

Refugios de Fauna Silvestre: Son aquellas áreas del territorio nacional que se estimen necesarias para la protección, conservación y propagación de la fauna silvestre, principalmente de aquellas especies que se consideran en peligro de extinción, ya sean residentes o migratorias. Entre sus objetivos principales encontramos: protección de la Fauna Silvestre y/o acuática y de su hábitat, defensa de especies en peligro de extinción y recuperación de sus poblaciones, proveer oportunidades a la investigación científica y la educación especializada, ecoturismo y participación ciudadana, proporcionar oportunidades al seguimiento ambiental, tanto en medios alterados como inalterados, proveer excedentes poblacionales con fines de repoblación.

Reservas de Fauna: Corresponden aquellas zonas que se solicitan para la expansión de programas experimentales, de organización y manejo de poblaciones de la fauna silvestre, con la finalidad de preservar la producción constante de las especies necesarias para la disposición de los recursos.

Reservas Forestales: Son áreas de patrimonio forestal Nacional que se pueden encontrar tanto en tierras del dominio público como privado y que debido a sus características y potencialidades deben destinarse a la producción permanente de productos forestales sin menoscabo de sus funciones protectoras, recreacionales y científicas, bajo el criterio de rendimiento sostenido a través de planes de manejo.

Santuarios de Fauna Silvestre: aquellas zonas donde habiten animales peculiares de la fauna nacional, o especies raras en el mundo, o aquellas donde la concentración de determinados animales constituya o pueda constituir motivo de recreación y turismo. Hasta el momento, no se ha propuesto el establecimiento de esta categoría de ABRAE en Venezuela.

Zonas Protectoras: Tienen su origen el la Ley Forestal de Suelos y Aguas y en la Ley Orgánica para la Ordenación del Territorio. Son aquellos espacios específicos que por sus características de relieve, vegetación, ubicación cercana a nacimientos o cursos de agua y susceptibilidad a las intervenciones humanas, ameritan una protección especial contra las actividades humanas perjudiciales al medio, tanto en su propio territorio como en el de su entorno al cual influencia o afecte una determinada actividad en la zona protegida.

Áreas Rurales de Desarrollo integrado, compuestas por aquellas zonas que deben ser sometidas a una estrategia de desarrollo fundamentada en la participación coordinada de las entidades públicas y la población rural organizada, con el objeto de concentrar y concertar esfuerzos hacia el logro de una auténtica prosperidad agropecuaria.

Áreas de Protección y Recuperación Ambiental, compuestas por todas aquellas zonas donde los problemas ambientales provocados o inducidos, bien por la acción del hombre o por causas naturales, requieran de un plan de manejo que establezca un tratamiento de recuperación o uno que elimine los fenómenos de degradación.

Sitios de Patrimonio Histórico-Cultural o Arqueológicos, compuestos por aquellas edificaciones y monumentos de relevante interés Nacional, así como las áreas circundantes que constituyan el conjunto histórico artístico y arqueológico correspondiente.

Reservas Nacionales Hidráulicas, compuestas por los territorios en los cuales estén ubicados cuerpos de agua, naturales o artificiales que por su naturaleza, situación o importancia justifiquen su sometimiento a un régimen de administración especial.

Áreas de Protección de Obras Públicas, compuestas por las zonas de influencia de las construcciones públicas, que deben ser sometidas a usos conformes con los fines y objetos de la obra.

Áreas Críticas con Prioridad de Tratamiento, integradas por aquellos espacios del territorio nacional que dadas sus condiciones ecológicas, requieren ser sometidas con carácter prioritario a un plan de manejo, ordenación y protección.
Áreas Boscosas bajo protección compuestas por todas las zonas de bosques altos, primarios o secundarios, que existen en el territorio nacional

Reservas de Biosfera, compuestas por aquellas zonas en la que se combinan la presencia de biomasas naturales que deben ser preservadas por su alto valor científico y biológico, con la presencia de poblaciones locales caracterizadas por modos de vida en lo económico, social y cultural, que configuran un especial sistema de relaciones hombre-espacio.

Áreas de Fronteras, ordenadas conforme a la estrategia global contenida en el Plan Nacional de Seguridad y Defensa y conforme a las características propias de cada sector fronterizo

Áreas de Manejo Integral de Recursos Naturales:
> Zonas de reserva para la construcción de Presas y Embalses: aquellas que por sus especiales características y situación, se consideren idóneas para la construcción de presa y embalse.
> Costas Marinas de Aguas Profundas: zonas marítimas que por sus especiales características y situación sean consideradas optimas para el desarrollo de puestos de carga y embarque las cuales comprenderán el área marítima que delimite en el Decreto.
> Hábitats Acuáticos Especiales para Explotación o Uso Intensivo Controlado: aquellas zonas tales como golfetes, albuferas, deltas, planicies cenagosas y similares que por sus riquezas marítimas lacustres o fluviales, sean de especial interés para la Nación.
> Áreas Terrestres y Marítimas con Alto Potencial Energético y Minero: zonas que contengan una riqueza energética y minera especial y que ameriten un régimen de preservación del medio combatible con extracción de recursos esenciales para la Nación.
> Zonas de Aprovechamiento Agrícola: áreas del territorio nacional que por sus condiciones edafo-climáticas deben ser resguardadas para su explotación agrícola, dentro de un régimen de mayor o menor preservación.
> Las planicies indudables: espacios del territorio nacional, adyacentes a los cursos de aguas superficiales y que pueden llegar a ser ocupados por los excesos de aguas cuando se desbordan de sus causes naturales.

que es la Ecorregiones


/La conservación de la diversidad biológica requiere esfuerzos a distintas escalas de espacio y tiempo. El enfoque ecorregional es una de las más recientes estrategias propuestas.

///Desde 1998, WWF organización a la que FUDENA es asociada, ha publicado el mapa de las Eco-regiones del mundo, y a través de su programa denominado GLOBAL 200, está orientando sus esfuerzos de conservación en las 231 Eco-regiones que a su criterio son las más importantes en términos de biodiversidad. Por ello, su metodología ha sido denominada "Ecorregional Based Conservation" o ERBC.

///Las ecorregiones son unidades de agua o tierra, relativamente extensas, constituidas por un mosaico de comunidades naturales, que exhiben especies de flora y fauna, procesos ecológicos y condiciones ambientales similares. En el mundo han sido identificadas 231 ecorregiones.

///La delimitación de las Ecorregiones del mundo, y particularmente la de Latinoamérica y el Caribe, ha sido lograda principalmente a partir de los trabajos de diferentes autores (Noss,1992; Noss y Cooperrider, 1994; Dinerstein y Olson, 1994; Dinerstein et al, 1995) cuyos objetivos han sido establecer prioridades de conservación partiendo de una aproximación biogeográfica.

///En Venezuela han sido identificadas 11 ecorregiones de acuerdo ************al Global 200 de WWF:

100% por ciento venezolano


1. Sur del Caribe
2. Bosques Montanos de la Costa
3. Llanos
4. Bosques Montanos de los Andes del Norte
5. Páramos de los Andes del Norte
6. Río Orinoco y Bosques Inundables
7. Bosques Montañosos de Guayana
8. Agua Dulce de Guyana
9. Bosques Húmedos de Guyana
10. Manglares Amazonas-Guyana
11. Bosques Húmedos de Río Negro-Juruá y Cauces altas de Ríos
de Amazonas.